Psicooncología

Psicoonlogía

"No tratamos a la enfermedad, sino al paciente, y por homogénea que sea a otros pacientes

la circunstancia de su salud, tiene en cada caso su peculiaridad, su propia palabra,

que ha de orientar nuestro trabajo con ellos"


La psicooncología es una subdisciplina de la psicología que se dedica al estudio, diagnóstico y abordaje psicológico de los pacientes con cáncer y sus familias.


Su foco de estudio son las reacciones psicológicas de las personas con la enfermedad, de sus allegados, e incluso del personal asistencial a cargo de los anteriores. Su actuación se puede extender desde el momento del diagnóstico, hasta las fases de hospitalización y/o tratamiento activo, o incluso en un periodo posterior de supervivencia oncológica.


Casi la mitad de las personas que tienen o han tenido cáncer, van a presentar algún problema emocional -trastorno depresivo, trastorno de ansiedad, etc..- o van a mostrar importantes síntomas de estrés, relacionados con los tratamientos o con la evolución de la enfermedad, incluso, después de que esta se haya superado.

Los profesionales de la salud, sabemos cada día más, de la importancia de las emociones en la evolución de cualquier enfermedad. Una buena actitud de afrontamiento es fundamental, mas aun cuando esta enfermedad es compleja y grave. Muchos, conocemos a alguien cercano que padece o ha superado un cáncer. En el momento de recibir la noticia, durante el proceso diagnóstico, y a lo largo del tratamiento, el enfermo se ve invadido por distintas emociones -miedo, ansiedad, rabia, tristeza, indefensión, culpabilidad o frustración-, muchas las sentimos a lo largo de nuestra vida, pero en esos momentos, cobran un significado especial, y adquieren una intensidad que no siempre somos capaces de manejar.


Estas emociones interfieren en nuestro día a día, generan dificultades para dormir, nerviosismo, irritabilidad o bloqueos, lloramos frecuentemente, o tenemos, dificultad de concentración, apatía o desgana. En definitiva marcan nuestra cotidianidad, pero también afectan a nuestro entorno, a nuestra pareja, trabajo o relaciones sociales, y por ello contribuyen a incrementar nuestro malestar, creando un peligroso círculo vicioso.

Mejorar la calidad de vida del paciente oncológico, significa intervenir en todos lo aspectos que se hayan visto alterados por la enfermedad y por su tratamiento, y hacerlo en todos los ámbitos de su vida: a nivel físico -mejorando las consecuencias médicas de la enfermedad en el organismo- y a nivel emocional -disminuyendo las sensaciones de aislamiento, indefensión y abandono, o reduciendo la ansiedad y la tristeza-. De igual modo, es muy importante para el bienestar psicológico del paciente, que este disponga de una información clara y correcta sobre la enfermedad y sus consecuencias emocionales.

La psicooncología, es una nueva sub-especialidad de la Oncología, que se centra en atender los aspectos psicológicos y comportamentales del paciente con cáncer.


Desde la psicooncología se llevan a cabo múltiples actuaciones. Globalmente, éstas pueden dividirse en dos enfoques:


  • Reactivo: centrado en ofrecer soporte psicológico para sobrellevar la enfermedad y sus consecuencias.
  • Proactivo: centrado en restituir la salud de la persona con cáncer y favorecer el retorno a su funcionamiento habitual previo.


Algunas de las actuaciones más habituales llevadas a cabo desde la psicooncología son:


  • En el momento del diagnóstico:
    • Ayudar al paciente y a sus seres cercanos a procesar y contener las emociones derivadas del diagnóstico
  • Durante el tratamiento:
    • Informar al paciente y a su familia acerca de los posibles cambios que experimentarán con el inicio del tratamiento
    • Ayudar a reorganizar su funcionamiento socio-familiar o personal, (probablemente alterado con el inicio del tratamiento)
    • Promover el mantenimiento o la restitución de la salud física o psíquica
  • Una vez el cáncer ha remitido (alta hospitalaria):
    • Asesorar y orientar al paciente que ha superado el cáncer, para favorecer una rápida y adecuada restitución de su funcionamiento y participación socio-familiar anterior
    • Promover un mantenimiento o una restitución de la salud física o psíquica
  • En situación de cuidados paliativos:
    • Soporte al paciente para enfrentarse al final de vida con dignidad y serenidad
    • Acompañamiento al paciente en el trabajo de aspectos espirituales
    • Manejo del dolor y otros síntomas
    • Orientación y consejo para un adecuado mantenimiento de la calidad de vida del paciente
    • Orientación y soporte a los familiares
  • Fase de duelo:
    • Acompañamiento durante la elaboración de las distintas fases del duelo

Mejorar la calidad de vida del paciente oncológico, significa intervenir en todos lo aspectos que se hayan visto alterados por la enfermedad y por su tratamiento, y hacerlo en todos los ámbitos de su vida: a nivel físico -mejorando las consecuencias médicas de la enfermedad en el organismo- y a nivel emocional -disminuyendo las sensaciones de aislamiento, indefensión y abandono, o reduciendo la ansiedad y la tristeza-. De igual modo, es muy importante para el bienestar psicológico del paciente, que este disponga de una información clara y correcta sobre la enfermedad y sus consecuencias emocionales.